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¿Olvida sus contraseñas? ¡Simplemente sea usted!

¿Sabía que el 78% de los usuarios olvida una contraseña en su vida personal, y un 57% requiere un restablecimiento de la contraseña en su vida laboral?

¿Ha olvidado su contraseña?

¿Quién no se ha olvidado de alguna contraseña en las últimas semanas? ¿Quién no ha recibido un correo electrónico avisando de que alguien había accedido a su cuenta y pidiéndole restablecer su contraseña? En nuestra vida personal y profesional accedemos a decenas de plataformas en las que necesitamos realizar alguna transacción, gestión o visualización de contenidos y que requieren un grado de seguridad alto o muy alto. Cualquier proceso en la banca online (consulta de saldos, transferencias, etc.), la realización de compras en marketplaces, el acceso al correo electrónico, las gestiones con la administración o el acceso a nuestras redes sociales son ejemplos que todos realizamos en nuestra vida cotidiana y en los que tenemos la obligación de acceder con decenas de contraseñas y dobles pasos de autenticación, lo que le supone al cliente un problema cada vez mayor de experiencia de usuario y de seguridad.

¿Cuántas contraseñas tiene memorizadas para acceder a las decenas de plataformas que utiliza semanalmente? ¿Cuántas veces tiene que restablecer su contraseña porque la ha olvidado? ¿Por qué cada plataforma exige a los usuarios diferentes tipos de contraseñas para validar su acceso seguro? ¿Por qué no podemos hacerle la experiencia más fácil y más segura a nuestros clientes? Según un estudio norteamericano, el 37% de los usuarios tenemos más de 20 contraseñas, el 78% de las personas olvidamos al menos una contraseña cada 3 meses, o el 57% de los usuarios hemos restablecido alguna contraseña en los últimos 90 días. 

Toda esta problemática viene generada porque las empresas, softwares, administraciones o plataformas ofrecen tres formas de verificar la identidad de los usuarios a la hora de acceder a sus propias cuentas. Con la biometría de voz, estas vías se están quedando obsoletas:

  • Contraseñas: algo que el usuario sabe, que debe memorizar y que en muchas ocasiones son alteradas por la propia plataforma (le obliga a colocar números, mayúsculas, símbolos, etc). Esta herramienta de seguridad es muy fácil de olvidar y de hackear.
  • Preguntas: algo que el usuario sabe y que se verifica mediante preguntas de una persona o de la plataforma a la que accedes. Este sistema de verificación tiene una seguridad baja ya que es fácil de suplantar la identidad de las personas (mucha gente puede responder a preguntas sobre la dirección de casa, DNI, dirección de correo, etc.). Además, son procesos muy largos (de entre 30 y 45 segundos) y poco amigable para el usuario.
  • Token Digital: algo que el usuario tiene, como un SMS de autenticación que recibe en su móvil o correo electrónico. Es cierto que este sistema aumenta la seguridad del proceso, pero es fácilmente superable en caso de robo del dispositivo o un duplicado de la tarjeta SIM, conocido como SIM Swapping. Además, empeora notablemente la experiencia de usuario obligando a tener siempre cerca un dispositivo y alargando en exceso el proceso.. Entonces, ¿a más seguridad, menor experiencia de usuario? En Veridas creemos que no.

Todas estas fórmulas de acceso han demostrado sufrir graves problemas de seguridad y provocan un empeoramiento constante en la experiencia de usuario.

  • El 37% de los encuestados por el estudio de HYPR tiene más de 20 contraseñas en su vida personal.
  • El 56% de usuarios no cambia nunca sus claves de acceso y el 42% de los internautas asegura utilizar la misma contraseña para todos sus servicios.

¡Olvide sus contraseñas! ¡Simplemente sea usted!

¿Qué solución sugerimos? Que los usuarios olviden todas sus contraseñas y solo necesiten  su propia voz. Gracias a la biometría de voz podemos verificar la identidad real de las personas en escasos 3 segundos de su voz, en cualquier idioma, sin la necesidad de repetir nada en concreto, con una mayor seguridad y en cualquier canal o plataforma de comunicación, ya sea presencial o remota. En resumen, pasamos de la presunción (lo que sabes o lo que tienes) a la certeza (lo que eres) a la hora de identificar. Suena mejor, ¿verdad?

Esta tecnología supone una revolución en los procesos de verificación de identidades en accesos a plataformas, pagos bancarios o call centers, entre otros muchos sectores. La biometría de voz supondrá el fin del uso de las contraseñas y la inclusión en el día a día de una herramienta verdaderamente robusta frente al fraude y la ciberdelincuencia.

Veridas voice biometrics es el software tecnológico más rápido para dar de alta a un usuario (solo 5 segundos) y en la verificación del mismo (solo 3 segundos). Además, y gracias a su desarrollo tecnológico basado en Inteligencia Artificial (redes neuronales), es una herramienta antifraude muy robusta, con técnicas anti-spoofing diseñadas para la detección de voces pregrabadas. Nuestra solución analiza la similitud de la voz y la autenticidad de la misma (si es real o pregrabada) con un porcentaje de eficacia de más del 99,5%.

Veridas · Ventajas Biometría de Voz.

La inteligencia artificial genera de cada voz un “vector biométrico” (un código de números) que es irreversible (nadie puede volver hacia atrás y recomponer esa voz), y privado, ya que desde Veridas diseñamos toda nuestra tecnología bajo la estricta política de privacidad de datos, cumpliendo con el GDPR y la CCPA. Además, y para añadirle un mayor grado de seguridad, este vector biométrico no es interoperable en ningún otro sistema digital, por lo que no tiene ningún uso más allá de verificar la identidad real de la persona a la que pertenece.